Cuba/Brasil: senadores brasileños lamentan muerte de Zapata y critican a LulaLos senadores criticaron el "silencio" que Lula guardó ante Castro tras la muerte de Zapata.
Las Claves:
* "Los disidentes cubanos querían que Lula intercediera" en favor de Zapata Tamayo y otros detenidos, pero "no hubo ninguna sensibilidad de su parte", apuntan senadores.
* "Si hubieran pedido conversar, habríamos conversado, porque no nos negamos a eso", dijo Lula.
Infolatam
Brasilia, 25 de febrero de 2010
Una comisión del Senado brasileño aprobó un "voto de pesar" por la muerte del disidente cubano Orlando Zapata Tamayo, en medio de críticas a la actitud del jefe de Estado, Luiz Inácio Lula da Silva, durante su visita a la isla.
"Aprobar este voto de pesar es un deber en nombre de los derechos humanos y de una causa que no se puede abandonar nunca, como es la democracia", dijo el senador Heráclito Fortes, del opositor Partido Demócratas, al presentar la propuesta a los miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado.
Fortes también criticó el "silencio" que Lula guardó sobre el asunto ante el presidente cubano, Raúl Castro, durante su visita de este miércoles a La Habana, un día después de la muerte de Zapata Tamayo, y su "negativa" a reunirse con miembros de la disidencia. "Los disidentes cubanos querían que el presidente intercediera" en favor de Zapata Tamayo y otros detenidos, pero "no hubo ninguna sensibilidad de su parte", dijo Fortes en alusión a una carta que los opositores al Gobierno cubano dicen haber enviado a Lula, en la que le pedían una reunión y su apoyo.
En la capital cubana, Lula lamentó "profundamente" la muerte del opositor y negó haber recibido esa misiva. "Las personas deben parar con eso de escribir cartas, decir que las enviaron y después guardarlas. Si hubieran pedido conversar, habríamos conversado, porque no nos negamos a eso", dijo Lula citado por la agencia Globo, entre otros medios locales.
Según esas fuentes, Lula respondió con "ironía" a preguntas sobre las críticas de los disidentes cubanos, que lo acusaron de ser "cómplice de los hermanos Castro". "Si ellos son disidentes en Cuba y ahora quieren ser disidentes de Lula, no hay ningún problema", fue la respuesta del presidente.
Lula también recordó que él hizo una huelga de hambre cuando estuvo en prisión, en tiempos de la última dictadura brasileña, y afirmó que la detuvo "a pedido de la Iglesia católica, que no lo admitía". Con base en esa experiencia, declaró que "si hubieran hablado" con él antes del fallecimiento de Zapata Tamayo, "le habría pedido que parara con la huelga de hambre y quien sabe si no hubiéramos evitado su muerte".
El "voto de pesar" fue aprobado con el respaldo casi unánime de los 19 miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores. El único voto en contra fue del senador João Pedro Gonçalves, del oficialista Partido de los Trabajadores (PT), quien sostuvo que la intención no era manifestar "solidaridad" a la familia de Zapata Tamayo, sino ayudar a "profundizar la disidencia en Cuba".
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